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Y al tercer día, la vida tiene sentido

Resucitó. Cristo ha resucitado en Santa Marina para darle sentido a todo. Empieza la vida donde acaba la oscuridad. Ya sonó allí Amarguras, el principio del fin sevillano, donde todo empieza, pero nada acaba.

Se cumplió lo mandado, en una Aurora, cerca de las ocho y media de la mañana, Dios Resucitó de entre los muertos. El recorrido que cambió esta hermandad el año pasado vuelve a ser un éxito, la cofradía vuelve a tener afluencia de público en lugares donde antes concurría al alba. La última hermandad de Semana Santa y primera de Gloria estuvo muy arropada por los sevillanos. Cerca de la media tarde concluyó la estación y así, finalizó todo. Sevilla ahora está en tiempo de Glorias, porque en Sevilla la Gloria nunca termina, ya se acabó la demora.

Sevilla se volvió a hacer completa y llena de vida. Toca soñar, ansiar la espera, porque no hay nada más bonito que la Esperanza y lo que porta y transporta en ella. Se cierra el círculo, Sevilla vuelve a ser Gloria.