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La ciudad entraba, por aquellos instantes, en completa y abrumadora ebullición. Primer viernes de Cuaresma, todos lo sabían. Todos lo sabíamos. El cielo, la calle, la reja, el altar, la taberna, el naranjo. La luz también lo sabe. Y Dios también, que en este viernes acerca sus manos un poco más al paraíso de nuestra atmósfera.

A pesar de todo ello, la ilusión y el trabajo volvieron a materializarse en una noche (otra más) para el recuerdo de esta casa. Después de cuatro años sin descanso, impulsados única y exclusivamente por nuestra fe y nuestra Semana Santa, Cinturón de Esparto volvió a presentar el cartel que anuncia su Semana Santa. Con el Cristo de los Desamparados siempre dormido en su ilusión de volver a ver la luz, comenzó el acto casi sin avisar, con una retrospección al siglo pasado.

La banda de las Cigarreras, que hizo las delicias de los presentes y nos trajo el sonido de una Semana Santa completamente distinta a la actual, interpretó “Cristo del Amor” y tanto asistentes como componentes, los que aún recordaban aquella Semana Santa ya perdida para siempre, se mostraron visiblemente emocionados. Un estilo, una historia y mucha evolución por delante. Simplemente la banda de las Cigarreras.

Todo comenzó con nuestro agradecimiento a la comunidad carmelita que tan amablemente nos cedió de nuevo un espacio incomparable, como es la iglesia del Santo Ángel, para realizar nuestra presentación. Después el acto prosiguió antes de que nuestro compañero Víctor García Rayo anunciara la vida y la obra de nuestra cartelista.

Sin abandonar su estilo literario y comunicador, hizo referencia a los colores propios de la pintura de Nuria y a toda su maestría. “La mujer que tiene el tacto en los ojos y la visión en las manos”, en palabras de nuestro presentador.

Una vez llegado el momento clave de la noche, el momento más especial y trascendente para todos nosotros, se consumó el fruto de todo el trabajo y apareció la Virgen del Patrocinio de regreso al barrio de Triana, en la plaza del Triunfo, en una pintura con multitud de detalles y con la Inmaculada por testigo.

En formato tabla, y con novedosos añadidos como algunos nazarenos en relieve, para dar sensación de realidad a la escena, es un “homenaje al nazareno”, en palabras de la autora.

Costumbrista, siguiendo su línea pero aportando elementos diferentes, una cerrada ovación del público recibió la obra, cuyas reproducciones se pudieron adquirir después a la salida del acto. “Es un cuadro que tienes muchas Semanas Santas en una”, desgranaba Nuria.

Para cerrar una nueva presentación, contamos con la presencia de Juan Carlos Cabrera, Delegado de Seguridad y Fiestas Mayores del Ayuntamiento de Sevilla, que instó a continuar con estos actos que aportan tanto a nuestra ciudad y nos animó a continuar con nuestro trabajo, de aquí a la próxima Semana Santa. También estuvo presente el grupo popular representada en una de sus concejalas.

En último lugar, motivado por Dionisio Buñuel, director de las Cigarreras, se realizó un homenaje sentido a Bienvenido Puelles, padre de un estilo, y se interpretó la marcha Cristo del Soberano Poder, primera marcha que se compone para la banda de las Cigarreras.

Desde aquí, en nombre de la dirección y todos los componentes, damos las gracias a todos aquellos que han hecho posible, un año más, la presentación de nuestro humilde cartel para toda Sevilla. Y por supuesto a todos nuestros seguidores y lectores. Desde hoy, ya comenzamos a trabajar para el próximo año si Dios quiere. Seguimos descontando esperas. Muchas gracias.