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El cartel de Víctor González para la Castrense del Rocío

En un año con unas circunstancias tan particulares como las que nos encontramos y en las que no se celebrará la Romería del Rocío, la Hermandad Castrense,con sede en Sevilla, no quería dejar de anunciar la festividad de Pentecostés de una forma especial y que quedará en la memoria de todos los rocieros con un cartel que conmemorará una festividad de Pentecostés distinta. El encargado de realizar dicha obra ha sido nuestro compañero Víctor González Felices,  que continúa el desarrollo de su obra artística basada en la fotografía y la creación digital con este nuevo cartel. Destacar que ya el pasado año fue cartelista de la Pastora de Santa Marina en Sevilla, además de haber realizado numerosas obras para otros puntos de Andalucía, destacando su ciudad natal, Almería, en la que ha sido cartelista de la Semana Santa hasta en dos ocasiones.

En palabras de Víctor González, «al recibir el encargo recibe la premisa inicial de que, en este año donde tanto protagonismo están teniendo ayudando a la población española en la crisis causada por culpa del Covid_19, apareciese un guiño en la obra a los cuerpos del ejército español ya que la Hermandad Castrense tiene la particularidad de tener su germen en el acuartelamiento militar de Tablada y estar integrada por miembros de los distintos ejércitos en su gran mayoría.»

Igualmente cita que «El cartel ha sido creado digitalmente en su totalidad y tiene como protagonista al Simpecado de la Hermandad sevillana. A partir de distintas fotografías y texturas, unidas al dibujo digital, distintos elementos componen el conjunto de la obra. En ella se ha representado el momento de la presentación en la mañana del Lunes de Pentecostés ante la Virgen del Rocío, un momento que tiene lugar en la plaza de Doñana donde tanta presencia tiene el paisaje vegetal de eucaliptos. Con siluetas de los mismos se recrea ese fondo junto a siluetas de golondrinas y estrellas que ya parecen difuminarse con el nacimiento de la mañana.Los rayos que bañan la parte superior de la obra representan un rompimiento de gloria donde el cielo se abre sobre la tierra mostrando la divinidad de la imagen que ilumina, en este caso la Virgen del Rocío presente en la cerámica del Santuario. Todo ello está encuadrado marco que aporta profundidad al conjunto para que el mismo también forme parte de la obra y entre la multitud que arropa al Simpecado vemos como se muestra el guiño a las fuerzas armadas donde aparece un miembro de la UME y otro del Ejército del Aire. En un año tan peculiar, se crea una obra que será visionada en pantallas de dispositivos móviles principalmente, por ello guarda una relación en sus medidas de 18:9.»