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Finalizó el mes de Mayo, mes de la Santísima Virgen María. En varios puntos geográficos de Andalucía se han conmemorado los aniversarios de las coronaciones canónicas en diferentes imágenes marianas.

En Sevilla hace 53 años, se coronaba canónicamente a la madre de los sevillanos. La Esperanza Macarena, en una celebración multitudinaria en la seo hispalense. A la que asistieron las grandes autoridades de la época.

Para esta ocasión la Virgen de la Esperanza Macarena, ha lucido el manto de tisú celeste con bordados en hilo de oro por el taller de Carrasquilla y que fuera restaurado en 2007 por José Ramón Paleteiro. Saya de volantes realizada por Charo Bernardino. Y ceñido a su cintura un fajín de militar celeste. Sobre sus sienes porta la corona de coronación canónica, diseñada en el año 1912 por el “genio” sevillano Juan Manuel Rodríguez Ojeda, y encargada su ejecución a la Joyería Reyes de Sevilla. Está realizada en oro de ley de dieciocho quilates, trabajado a buril esgrafiado.

Cruzamos el río y nos adentramos en el corazón de Triana, en la Calle Pureza, donde vive la Esperanza. Preparada para el XXXIII Aniversario de su Coronación Pontificia así como las festividades de Pentecostés y Corpus Christi, en esta última festividad, la hermandad es la encargada de organizar la Procesión del Santísimo Sacramento por las calles del popular barrio trianero.

Luce esplendorosa en su camarín el manto de terciopelo rojo bordado en oro, y que fue realizado por el taller de Santa Bárbara en el año 2012. El manto presenta bordadas las vistas delanteras, según un diseño de Joaquín Castilla basado en un boceto original de Francisco Javier Sánchez de los Reyes. Saya blanca realizada por Benjamín Pérez en 1989, bordada en oro y sedas de colores sobre tisú blanco y aplicaciones de pedrería. Y como remate, la Corona, que fue donada en 1963 por el orfebre trianero Jesús Domínguez Vázquez. Es la presea con la que procesionó la Santísima Virgen desde entonces hasta su Coronación Canónica en 1984.

(Fotografía José Campaña)