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Erigida la Fraternidad de la Virgen de la Merced de San Gregorio

Se ha dado a conocer por parte de la Comunidad de Padres Mercedarios del Convento de San Gregorio la erección de una nueva fraternidad en torno a la imagen de la Virgen de la Merced que recibe culto en el templo conventual. Nace erigida de la nueva labor pastoral de la provincia de Castilla, de la que depende la mencionada comunidad, que desea la fundación de este tipo de fraternidades en aquellos conventos que dependen de la misma.

El título de la fraternidad es de Nuestra Señora de la Merced y San Pedro Nolasco, y tendrá como objeto y fin la formación espiritual de todos sus integrantes, la propagación de la devoción a la Santísima Virgen de la Merced y la difusión del carácter redentor de la Orden de la Merced heredado de su fundador Pedro Nolasco. Además, participará en las campañas de caridad que realiza la Orden.

Los Estatutos de la Fraternidad han sido elaborados por los Padres Mercedarios de la Comunidad de San Gregorio y una comisión creada para tal fin, estando actualmente en su última fase a la espera de su aprobación final y definitiva por la Provincia de Castilla.

La Comunidad anima a todos aquellos devotos de la Virgen de la Merced y afines al carisma mercedario a participar en este proyecto. El formulario de ingreso se podrá solicitar en la iglesia conventual al término de cada día de Solemne Triduo (21, 22 y 23 de septiembre) a Nuestra Madre y Señora de la Merced, así como en el día de su festividad, el 24 de septiembre. También se ha habilitado un formulario en la página web de los Padres Mercedarios de San Gregorio, que se puede descargar on-line. Se tiene la intención de que las primeras juras de hermanos e imposiciones de escapularios comiencen en el último trimestre del presente año 2020.

En cuanto a la talla de la Virgen de la Merced, según el historiador Juan Martínez Alcalde “nos encontramos ante una imagen de candelero de tamaño natural (158 cm). Fechada entre finales del siglo XVIII o principios del XIX”, probablemente deba su factura al escultor gaditano José Fernández Guerrero. La imagen procede de la Comunidad Mercedaria de Marchena (Sevilla), y fue traída en los años 40 a la iglesia de San Gregorio. Antes de reponerse al culto en su nuevo emplazamiento, la talla sufrió ciertas modificaciones, siendo lo que más llama la atención el añadido de pelo tallado, cambio del juego de manos, el repinte general del rostro de la Virgen, y la inclusión de la imagen del Niño Jesús (que anteriormente no poseía, debido a su iconografía de “Merced Comendadora”, y que procede de los talleres de Olot).