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El Señor de la Salud y la Virgen de las Angustias de los Gitanos visten de morado, el color de las rogativas

La Hermandad de los Gitanos introduce novedades en esta semana donde comenzamos la Fase 2 de la vuelta a la normalidad tras la crisis sanitaria vivida, adaptándose a esta nueva etapa acogiéndose al nuevo aforo máximo permitido pudiendo acoger 90 personas en el interior del Santuario y reabriendo la Tienda de Recuerdos de lunes a domingo de 10 horas a 13 horas y de 18 horas a 21 horas y la Casa Hermandad para la atención al hermano, de lunes a jueves, de 18 horas a 21 horas. Por las mañanas, de lunes a viernes, en horario de 09:30 horas a 13:30 horas, sin olvidar que aun hay que ser cautelosos y cumplir con las exigencias higiénicas necesarias.

Tanto el Señor como la Virgen visten con tonos morados, al ser este el color de las rogativas. Precisamente ahora, es tiempo de ello, de oración constante para pedir por el cese esta pandemia de Covid-19. Nuestro Padre Jesús de la Salud viste túnica lisa de lana fina morada, realizada por Cerezal en el año 2011.

La Virgen de las Angustias porta saya blanca de tisú de plata bordada en oro por las Trinitarias de Cádiz y donada por Paco Antúnez en el año 1962. El tocado está realizado con un encaje de aguja del siglo XIX ofrecido por un grupo de hermanos, a través, de la rifa de un Niño Jesús donado por un hermano en el año 2000. El manto es de terciopelo de seda morado. Además, porta una toca con encaje de aplicación de Bruselas y diadema de plata sobredorada, obra de Ramón León en 2005. Lleva un pañuelo que es un encaje antiguo de Malta donado por la familia Casablanca. El fajín que luce es de brocados del siglo XVIII y XIX en tonos blancos, donados por un hermano en el 2014.

En su pecho, el broche del Patronazgo de los Donantes de Órganos donado por una hermana en 2018. Finalmente, porta, la Virgen de las Angustias, una medalla de la Hermandad del Rocío de Triana procedente de su ajuar, simbolizando en ella el afecto por esta corporación, además de por todas y cada una de las hermandades rocieras, y de forma muy especial, por el pueblo de Almonte que este año, que era tan especial, no va a poder vivir su universal Romería, aunque sí vivirá un Pentecostés diferente, un Rocío de Luz.