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Como era de esperar, ante la prolongación del estado de alarma por la pandemia Covid-19, las primeras procesiones del calendario letífico y sacramental en Sevilla están siendo suspendidas, viéndose aplazados otros cultos internos de estas hermandades.

Una de las hermandades sacramentales que ha tenido que suspender su Procesión de Impedidos por la feligresía de la Parroquia es la Archicofradía del Sagrario, procesión que tenía prevista su fecha el próximo domingo 19 de abril y que este año, como novedad, habría salido del interior de la Catedral, donde reside provisionalmente por obras en la Parroquia aledaña al magno templo.

Esa misma jornada también se habría realizado la Procesión de enfermos e impedidos de la Hermandad Sacramental del Corpus Christi y la Inmaculada Concepción, que en un comunicado ha hecho oficial esta suspensión al mismo tiempo que ha anunciado la donación de 4.000 € a instituciones y órdenes religiosas que, a su vez, se encuentran ayudando a familias sevillanas que atraviesan una delicada situación económica.

Otras procesiones sacramentales suspendidas son las de la Soledad de San Lorenzo y la de la Reina de Todos los Santos. La primera estaba prevista para finales de mayo, pero en la corporación del Sábado Santo no ven viable la organización de la misma para esa fecha. La segunda, prevista para el día 10 del mismo mes, ha sido suspendida junto con todos los otros cultos eucarísticos y marianos que tenía previsto celebrar la hermandad de la calle Feria entre abril y mayo.

Estas decisiones se suman a las tomadas en días anteriores por hermandades como la de la Virgen del Mar y la Asociación de María Auxiliadora de Nervión que han suspendido todos sus cultos previstos para el próximo mes, incluyendo las salidas procesionales. Otras hermandades de «la segunda parte» del calendario letífico han suspendido igualmente los cultos que tenían programados para mayo, como Valvanera y el Rosario de San Julián. Algunas hermandades de penitencia siguen viéndose afectadas como es el caso de Montserrat, que ha suspendido los cultos previstos para su Dolorosa a finales de abril. Y todo ello sin olvidar los numerosos procesos electorales que han sido aplazados hasta fechas más propicias.