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Nuria Barrera es una de las artistas de referencia tanto dentro como fuera de Sevilla. Autora de numerosos carteles, como el de la Semana Santa de Sevilla de 2013 y el de Cinturón de Esparto de 2019.

Son muchas las cosas que está echando en falta en este tiempo de confinamiento, como todo buen cofrade. Primero a la familia alrededor de las procesiones. Es un encuentro anual único. Son días de convivencia y vivencias compartidas desde mis padres y familia política, a mi sobrinilla más pequeña, en sillas y palcos, en la calle compartiendo una cerveza entre Hermandad y Hermandad. Y a todas y cada una de las Hermandades y todo lo que desarrollan los sentidos alrededor de las mismas. Nuria rememora con nostalgia el olor a cera, incienso, a las flores de los palios, los naranjos y el sonido de murmullos , entre marchas y racheos de costaleros o bambalinas en varales. Y seguiría, porque son tantas cosas…

He echado mucho de menos la Cuaresma, mucho, y las vísperas, el Domingo de Pregón, las túnicas colgadas y el ajetreo previo. Y ese Viernes de Dolores que es la puerta a los días del gozo.

Nuria está viviendo esta situación a ratos bien, a ratos con mucha melancolía. Se veía venir y llegadas las fechas estaba asimilado. Si puedo decir que estoy disfrutando de cosas que por mi trabajo y horas en el estudio, no podía. Y es que la artista sevillana está disfrutando del hogar con los suyos, haciendo cosas que posponía por falta de tiempo. Decoración, orden y limpieza, ejercicio, así como cine, música, cocina y de acercarse a Dios de una manera muy distinta, valorando más la vida y las cosas sencillas, como puede ser dar un paseo. Con todo además, trabajar en estos días, impensable para mí durante la Semana Santa.

Ante la situación que se nos presentará una vez acabe la crisis sanitaria, Nuria es optimista pero tiene clara una cosa, que todos tendremos que poner de nuestra parte para sacar esto adelante. Adaptarnos a circunstancias y hechos, y arrimar el hombro entre todos para que el arte siga formando parte de la historia de las hermandades, agrupaciones y consejos, engrandeciendo su patrimonio.

Nuria tiene por delante muchos muchos proyectos cerrados y algunos por venir que si Dios quiere verán la luz en los próximos meses y ya para el próximo 2021. Doy gracias a Dios todos los días. Recibo también correos de particulares interesándose por posibles obras para su propia colección, y la verdad, es una satisfacción.

Que Dios nos dé salud para vivir plenamente, todos, la próxima Semana Santa.