A la Hermandad de las Siete Palabras se la conoce así por uno de sus titulares, el Santísimo Cristo de las Siete Palabras. Este titular posee tal advocación en alusión a las siete últimas palabras que pronunció Jesús en la cruz. Y más concretamente, el misterio que forma con el resto de imágenes, representa la tercera palabra que pronunció el Redentor antes de su muerte.
Siete palabras marcan a esta Hermandad por su crucificado titular. Pero haciendo una alegoría de esas siete palabras del Maestro, se pueden encontrar otras siete palabras que sean significativas y representen a esta Real e Ilustre Hermandad. A saber: misericordia, San Vicente, Pasan los Campanilleros, fusión, Sagrado Corazón de Jesús, la túnica y la plata.
La primera, alude a Nuestro Padre Jesús de la Divina Misericordia, encarnando este titular uno de los principales valores que rigen al buen cristiano.
San Vicente, la segunda palabra, es el nombre de la parroquia donde esta Hermandad reside, pero también es el barrio del mismo nombre y que tanto tiene que ver en la historia de esta antigua Hermandad.
Tercera palabra: Pasan los Campanilleros. Una obra casi centenaria, un clásico dentro de las composiciones musicales para banda de música, y que a pesar de lo que pueda parecer, está dedicada a esta Hermandad y más concretamente al Santísimo Cristo de las Siete Palabras.
Fusión. Una palabra que tiene muchísimo que ver en la historia de esta corporación. Hasta cinco Hermandades se fusionaron -la última en 1966- para dar lugar a la Hermandad tal y como la conocemos hoy.
El Sagrado Corazón de Jesús es la quinta palabra. A raíz de una de las fusiones, se incorporó como titular al Sagrado Corazón de Jesús dentro de esta Hermandad y así se convirtió en la primera que lo hacía en Sevilla.
Uno de los elementos más reconocibles de esta hermandad es la sexta palabra: la túnica. Mezclando el blanco y el rojo, la túnica de las Siete Palabras es considerada la más antigua de cuantas procesionan en la Semana Santa sevillana.
La séptima y última palabra es la plata. Hay dos elementos característicos de esta Hermandad con este metal, dos pasos en concreto. El primero es el paso de Ntro. Padre Jesús de la Divina Misericordia, pues no es habitual ver un paso de Cristo que sea de plata. Y el segundo es el paso de la palio de la Virgen de la Cabeza, que aunque ya no sea el actual ocupará siempre un lugar en la historia de las cofradías.
Siete palabras que son pocas para describir a una Hermandad de la envergadura y recorrido como tiene la corporación del Miércoles Santo, mas hay que poner en valor que también fueron siete las últimas palabras del Señor en la cruz, y sin embargo nos dejó mucho más
