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La Hermandad de Montserrat lleva bastante tiempo trabajando para hacer del primer lunes de Cuaresma y el tradicional Vía Crucis sevillano, una jornada única y particular, ya que por primera vez estará presidido por un Crucificado erguido y recto, tal y como son concebidos, pero además, será la gran talla de Juan de Mesa quien lo protagonice.

Tras un camino difícil y diversas reuniones mantenidas con el Consejo de hermandades, se ha terminado aceptando la propuesta de la corporación del Viernes Santo para que el Cristo salga de forma vertical. El pasado martes 26 de febrero tuvo lugar la última para detallar los últimos flecos de la salida.

Llevará, por tanto, la misma posición que en el paso de misterio pero estando más cerca del suelo, la hermandad busca que el crucificado sea el verdadero protagonista y que los cofrades puedan admirar la talla de la manera más imponente posible.

Las andas ya se han probado, fue la noche del pasado lunes 18 de febrero cuando se llevo acabo ese pequeño ensayo con las andas que pueden calzar entre 30 y 34 personas y que se han realizado para la ocasión. Como detalle, destacar que los pies del cruficado quedarán unos 40 cm por encima de la mesa de las andas y apenas a unos 20 cm del suelo para que el centro de gravedad sea el más bajo posible y con ello asegurar el estado de la imagen y la facilidad para llevarla.

Algunos detalles más son que la hermandad del Cachorro ha cedido sus faroles para iluminar las andas el pequeño canasto que estas tienen, se recubrirá con los moldurones del paso de la Pura y Limpia del Postigo y el llamador del paso de palio de la Virgen de Montserrat.

La capilla quedará abierta el sábado y el domingo, días en los que el Cristo de la Conversión del Buen Ladrón ya estará colocado en las andas de salida para el Vía Crucis del Consejo.