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El dorador Enrique Castellanos ha culminado la restauración de la peana de salida y, a su vez del altar en el retablo mayor de la parroquia de San Julián, de la Virgen de la Hiniesta Gloriosa. Esta emblemática pieza del patrimonio de la corporación del Domingo de Ramos ha vuelto a lucir sus brillos originales tras tres meses de trabajos. La intervención ha consistido en afianzar su estructura, además de la reposición de piezas, y dorado y estofado de la misma.

Realizada en el taller taller de Antonio Castillo Lastrucci en los años cuarenta, fue ejecutada a la par que realización de la imagen que sustituyó a la original; destruida en la II República. Construida en madera de pino, tallada, dorada y estofada, «la pieza presentaba defectos de ensamblaje que habían causado a lo largo del tiempo un deterioro progresivo de su estructura. Igualmente se apreciaban pérdidas de algunos elementos y desperfectos en el dorado por el uso y manipulación de la misma», comenta Castellanos.

En el taller se ha sometido a una intervención integral, eliminando los estratos existentes y actuando sobre el soporte de madera. Se ha reconstruido el ensamblaje, «se le ha proporcionado mayor solidez» a través de diversas técnicas de carpintería, y se han ejecutado en madera de cedro diversos elementos desaparecidos de la obra.
Tras la actuación sobre el soporte, se procede al estucado de la misma. Paso previo a estos trabajos, es la reconstrucción de diversos elementos inexistentes, así como el nivelado de resaltes entre las piezas de madera, empleando como materiales cola orgánica con carga de
carbonato cálcico, añade Castellanos. Todo concluye con el trabajo sobre el estrato de preparación, con el escofinado, rascado y lijado, pasando a la fase propiamente de dorado.

Para la labor de dorado, se ha procedido previamente al lavado de la pieza, para posteriormente aplicar el bol aglutinado con cola de origen animal, tras lo cual y una vez pulido el bol, se diferencian las zonas de los brillos y mates. Aplicación de oro fino, bruñido de
brillos y valoración mediante cola orgánica de mates. Posteriormente los motivos florales, han sido estofados con la técnica de temple al huevo