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Descubriendo a la Virgen de la Salud del Santo Ángel

“Después de cuatro siglos prisa no hay, pero parece que ahora es el momento histórico”. Con estas palabras rebosantes de ilusión hablaba el prior del convento carmelita del Santo Ángel, Fray Juan Dobado, acerca del nacimiento del grupo de fieles del Santísimo Cristo de los Desamparados, a raíz de la procesión extraordinaria de rogativas el pasado mes de junio, con motivo del IV centenario de la hechura de la imagen de Montañés.

El grupo de devotos ya ha cumplido con el primer punto de su programa de actos dedicado a sus imágenes, el mencionado crucificado y la Virgen de la Salud, obra desconocida atribuida por todos los expertos artísticos a la gubia del escultor archidonés Juan de Astorga. Y es que el pasado 8 de diciembre, festividad de la Inmaculada Concepción de la Virgen, la imagen mariana estuvo expuesta por primera vez en solemne besamanos en el Santo Ángel, con una disposición bastante particular. Ricamente enjoyada en el pecherín, lució una saya roja bordada y un manto azul bordado con motivos serpenteantes. En la parte trasera, una ráfaga dorada custodiaba las espaldas de la Virgen añadiendo espectacularidad a la escena.

De este modo, el grupo de fieles intenta estimular la devoción a la Virgen de la Salud en un día tan señalado para el calendario religioso y cofrade. El siguiente acto programado será, Dios mediante, el conjunto de cultos dedicados al Santísimo Cristo de los Desamparados.

La imagen de Astorga no dejó indiferente a nadie y ha supuesto un paso más en los anhelos del grupo de cofrades del Santo Ángel, que sin duda poseen dos imágenes soberbias, cada una en su estilo, y con una proyección incalculable.

Manuel Lamprea

(Reportaje de Victor González y José Alberto Rodríguez/Vídeo Miguel Ángel Vilas)

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