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Hoy se ha celebrado con una Solmene Eucaristía el 30 Aniversario de la llegada del Cristo de la Providencia, obra de Luis Álvarez Duarte, a la Parroquia de la Trinidad. Una imagen que fue encargada por el desaparecido y querido párroco de la Trinidad, Don Antonio Gómez Aguilar que se bendijo en la cuaresma de 1987.

Desde la Fraternidad Santísimo Cristo de la Providencia, que surge en enero de 2012 por iniciativa del actual párroco, don José Juan Jiménez Güeto, se planteaba hace tiempo hacerle un paso procesional a la imagen de Duarte para su vía crucis cuaresmal. Un paso que ya tiene diseño de Miguel Ortiz y Manuel Jurado y que en la Cuaresma de 2019 será una realidad.

La presentación de este diseño ha tenido lugar esta mañana, antes de la celebración de la Eucaristía de Aniversario, en los salones parroquiales. Los miembros de la Fraternidad han celebrado una asamblea en la que se ha abordado la marcha de esta corporación y se ha presentado el proyecto.

Será un paso con mucha simbología y personalidad, realizado en madera de cedro real procedente de Brasil,  que se inspira en el estilo barroco del retablo mayor de la Parroquia de San Juan y Todos los Santos -Trinidad-.

El canasto tiene un sinuoso perfil de bombo que sirve de pedestal a la peana que eleva la Sagrada Imagen del Señor. La planta está realizada en forma de entrantes y salientes, formas mixtilíneas, que aportan dinamismo a toda la estructura.
En dicho canasto, destaca la elevación de una hornacina central, en el frontal y la trasera, que recrea la propia arquitectura del retablo principal de la Trinidad, con la Virgen del Coro presidiendo el conjunto. En la hornacina trasera, irá la imagen de la Santísima Trinidad, que se encuentra en el retablo del Santísimo Cristo de la Salud.
Todo el canasto está rematado por una gran cornisa sobre la que montan hojas, dando una sensación de movimiento muy acusado.

En la vista lateral del proyecto podemos apreciar como desaparecen las hornacinas para dar paso a una decoración barroca que deja exenta la visión lateral de la peana y ángeles.

Tanto en las esquinas como en las zonas centrales irán albergadas cartelas que refieren a la propia identidad de la Corporación. En las esquinas frontales irán representados los santos fundadores de la Orden Trinitaria, San Juan de Mata y San Félix de Valois. En las traseras, Santa Inés y Santa Catalina. En las cartelas laterales centrales irán representadas sendas escenas del Evangelio referidas a los niños y a nuestros mayores, en recuerdo a los fines esenciales de la Obra Pia Santísima Trinidad. En el resto la iconografía remitirá a santos y personalidades relacionados con la parroquia. En ellas también pueden verse claras alusiones a la ornamentación e iconografía de la parroquia, tales como la concha de San Juan en las cartelas laterales y en las frutas y festones, inspirados en el retablo mayor.

Como elemento característico del conjunto, llama la atención la peana que se eleva sobre el canasto, rescatando la tradición de las peanas procesionales cordobesas del siglo XVII y XVIII. En ella se articulan en forma piramidal una serie de molduras y bombos, que sustentan dos ángeles pasionistas que abrazan la Cruz de Cristo, además de aportar luz directa sobre la Sagrada Imagen.

En cuanto al respiradero, se conforma de manera clásica con baquetón y una profusa talla en la que destacan las zonas centrales con cartelas y cabezas de querubines. En el diseño del faldón se puede observar un dibujo de bordados, copiados de la bancada del Altar Mayor de la Trinidad.
La iluminación se basa en cuatro grandes candelabros arbóreos de esquina, de nueve puntos de luz cada uno, así como dos laterales de cinco puntos.