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Vísperas

VISPERAS……… Mi cuerpo me anuncia que ya esta aquí, no, no es la primavera, no es el cambio del tiempo, es algo que llevo esperando trescientos cuarenta días, es algo que hace que mi cuerpo como el ave fénix, renazca de sus cenizas, que como la Diosa Venus saliendo del mar, en el nacimiento de Venus, de Sandro Botticelli. salgo desnudo, limpiando mis pecados para entrar en las vísperas impoluto, para estar mas cerca de lo que se nos acerca. La actividad de la ciudad parece que crece, que todo se transforma, que la gente se echa a la calle fruto del buen tiempo y del cambio de la estación, pero creo que no es eso, es que las vísperas ya esta aquí, la gente intuye que algo grande se esta acercando y lo celebra, echándose a la calle para disfrutar ese “algo” que lo va a transformar todo, que va a convertir a las personas en itinerantes callejeros, buscándole a Él. Encontrarse con Él va a ser el principal argumento de esa multitud, que pondrá como excusas, otros miles de argumentos, pero el principal es Él. Los templos se abrirán para exponer las imágenes en cultos ( triduos, quinarios, septenarios, besamanos, besapies, etc) anuncia la actividad de la hermandad, que irá creciendo de manera exponencial conforme se acercan las fechas para tomar un ritmo frenético y sin descanso de cara a los últimos días, anterior a la Gran Semana, donde el ritmo se convertirá en algo comparable al bullicio que se respira en los grandes mercados, parece una locura, pero no lo es, todo esta medido y aunque parezca lo contrario la tranquilidad debe reinar, el tempo esta regulado, por y para la perfección, los altares efímeros van cobrando forma y como un curso acelerado de arquitectura, las pasos empiezan a aparecer en todo su esplendor.

El tiempo mágico de las vísperas, hace que miles de personas, acudan cada año como una sola a los cultos de sus hermandades, que las frías estancias de las iglesias, se conviertan en un hervidero de calor humano y que los sermones de sacerdotes tengan un destinatario multitudinario. El tiempo mágico de las vísperas hace que nos despierte en nuestro interior ( aunque lo tengamos todo el año, pero en este tiempo nos crece) un sentimiento que creíamos adormecido y es el sentimiento reconfortante de que Él lo tenemos mas cerca que nunca, que por medio de esa comunión que se va a establecer con Él en ese acercamiento que nos llega vía: vista-oido-tacto-gusto-olfato de la Semana Grande, nos va a llevar mas cerca de Él, mas cerca de Ella, mas cerca de nuestro seres perdidos que ya disfrutan del amor que desparrama por los reinos celestiales nuestro Padre eterno. La Semana de Pasión, llegara, disfrutaremos increíblemente de ver a nuestros titulares en las calles, bendiciendo y curando males, que recibirán en formato de oración que hace que nuestras preocupaciones se las lleve el viento y el mal sea mas llevadero. Pero con lo que disfrutaremos es con las Vísperas, con ese tiempo no medido con el que se anuncia que todo esta por venir……. Dedicado a mi Padre que muy seguramente esta disfrutando en el reino celestial de de sus padres y sus hermanos y de la suma presencia de nuestro Divino Salvador.