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Entrevista a los Hermanos Delgado

En el número 48 de la sevillana calle Goles se ubica el Taller de los Hermanos Delgado, Ángel, José y Francisco Javier, artífices de innumerables piezas labradas en metal y orfebres de renombre de la capital sevillana.

Sus obras, distribuidas por toda la geografía nacional, tienen un inconfundible sello imprimido por la dedicación y amor a la profesión que llena sus vidas desde hace más de 30 años.

Nos abrieron las puertas de su taller y pudimos hacerles algunas preguntas que nos acercarán a este maravilloso mundo, muchas veces oculto y desconocido para el cofrade, como es la orfebrería.

¿Cómo son los inicios de Orfebrería Delgado?

Como todo principio, no fue nada fácil hacerse un hueco en un mundo de tanto prestigio como es el de la orfebrería sevillana. El primer trabajo que entra en el taller es el Sagrario de la parroquia de San José Obrero, el cual solo contaba solo con la puerta delantera y se completó en su totalidad. Después se hizo la orfebrería de un techo de palio de para Badajoz.

¿Cuál es el trabajo que os lanza a la fama en Sevilla?

A raíz de los trabajos que hemos dicho anteriormente, la hermandad de la Resurrección contacta con nosotros y se hace un juego de bocinas que se exponen en el palacio de congresos de Sevilla, siendo el primer trabajo para una hermandad de Sevilla. Aquí comienza toda la historia.

Se presenta un proyecto de paso de palio para la Virgen de la Aurora y al aprobarse se ejecuta al completo en tan solo 5 años, se estrena la candelería de la Virgen de los Dolores de Santa Cruz y un largo etc. que nos lleva hasta la actualidad.

¿En estos más de 30 años de andadura, de que trabajo os sentís más orgullosos? ¿Podríamos decir entonces que es el del palio de la Aurora?

La verdad que nosotros siempre decimos que la obra de la que nos sentimos más orgullosos es de la última que sale del taller. El palio de la Aurora ahí está para disfrute de sus hermanos, nos dio el reconocimiento de la Sevilla cofrade y siempre lo llevaremos a gala.

Y si dividimos la historia del taller en décadas, ¿qué obra representa cada una?

Los años 80 son los inicios, la Resurrección, como hemos dicho anteriormente, es la gran impulsora nuestra. En los 90 vino el premio Demófilo por los faroles de cola del Cerro y en el 2000 nos lo volvieron a dar por el palio de la Merced de Pasión.

Un sinfín de trabajos que recorren numerosos pasos de palio, carretas para hermandades del Rocío, y que culminan con 3 Coronaciones Canónicas, las del Cerro, Trinidad y Regla.

Años de ilusión, trabajo a deshoras, fines de semanas y dedicación a nuestra obra para que perdure en la historia con nuestra firma, esa es la mayor gratificación que podemos recibir.

Normalmente en una obra de arte, solo vemos el resultado final, pero ¿qué hay detrás de cada encargo que llega al taller?

Aunque cada obra tiene sus particularidades, hay ciertos pasos que solemos seguir. Lo primero es empaparnos del lugar donde va dirigida la pieza a realizar. El orfebre no puede dejar su impronta sin más, se trata de hacer algo en consonancia a lo que la rodea, el estilo de la hermandad en sí para que el proyecto tenga una idiosincrasia propia.

A partir de la aprobación del dibujo, que es el comienzo de todo, este se lleva al tamaño real para ejecutar los repujados y trabajos de carpintería siguiendo un guion de principio a fin, aquí no debe de haber improvisación más que el detalle del autor.

La orfebrería es uno de los estilos artísticos más completos porque se tocan muchas ramas, desde los conocimientos histórico-artísticos de los movimientos a lo largo de nuestros días, pasando por los conocimientos de dibujo lineal y artístico, el conocimiento de los materiales, de las técnicas del abultado y el repujado, soldadura, fusión, enderezado de materiales, terminación de superficies, fundición, torno, lampistería, los baños electrolíticos, el modelado y vaciado de barro o la carpintería. Todo es un conjunto de muchísimos oficios que debemos de conocer en profundidad para que el resultado sea perfecto.

El diseño es una de las partes que menos repercusión tienen y a juicio de vuestras obras, los hermanos Delgado y en particular Pepe, que es quien se encarga de esta parte, podría ser uno de los grandes olvidados de Sevilla. ¿Qué papel juega en vuestras obras?

Es el comienzo de todo. Sin duda hay que tener el don en las manos para que el resultado final sea una gran obra. Yo siempre digo que el arte de la orfebrería va de principio a fin y el principio es el dibujo, por eso nuestras obras nos gusta diseñarlas a nosotros mismos, a mano, como se ha hecho siempre, soy un renegado de las nuevas tecnologías.

¿Cómo veis el estado actual de la orfebrería?

Pues por desgracia, esta época de necesidades ha hecho que cualquier persona en su casa se pueda poner el apellido de orfebre y hacer una obra, que puede ser legítimo por las circunstancias que se han vivido estos años y lo puedo entender, pero no paga sus impuestos y nosotros sí. Esto cierra puertas de una forma o de otra.

Pero la realidad de esto es que aquí luchamos a diario por mantener el taller abierto, que el simple hecho de abrirlo ya nos cuesta el dinero, y sobretodo luchamos por dar trabajo a todos nuestros empleados. Precisamente en estos años nos hemos adaptado muchísimo a las necesidades de las hermandades, manteniendo nuestra calidad y dedicándole infinidad de horas, seguimos trabajando para que esto siga vivo.

¿Qué proyectos tenéis en el taller? ¿Cómo veis el futuro?

Desde proyectos más pequeños, hasta obras que no sabemos si veremos terminadas en nuestra vida. El paso del Cautivo de Ayamonte, el de la Caridad de San Fernando, el palio de la Estrella de Córdoba o el del Corpus de la localidad almeriense de Aguadulce por nombrar algunos. Todo obras muy particulares y en las que intentaremos dejar nuestro sello para que perdure en la historia.

Para terminar, los Hermanos Delgado han estado presentes poniendo su marca a varias Coronaciones Canónicas y con la Paz no podría ser menos. ¿Cómo la afrontáis y en qué aportaréis vuestro trabajo?

Con muchísima ilusión como no podía ser menos. Vamos a realizar una diadema de estilo neogótico que portará la imagen D.M. en su traslado a la Catedral, así como también restauraremos la corona para enriquecerla y acercarla a su diseño original.

Si tuvierais que expresaros con una palabra:

-LA SEMANA SANTA: Santa Cruz

-UN MOMENTO: La salida de Gran Poder

-UN PALIO: La Esperanza Macarena

-UNA MARCHA: Estrella Sublime.