Blog

María José Sánchez, natural de Córdoba, es periodista para Canal Sur, primero en radio y posteriormente en televisión, donde ejerce como directora de informativos en Córdoba. En el ámbito cofrade, es hermana de la hermandad de la Paz y Esperanza, ocupando el cargo de Camarera Mayor y miembro actual de la junta de gobierno. Asimismo es secretaria de la comisión pro-coronación canónica de María Santísima de la Paz y Esperanza y forma parte de la comisión que está preparando los actos conmemorativos del 75 aniversario de Nuestro Padre Jesús de la Humildad y Paciencia.

Recientemente ha sido designada Pregonera de la Semana Santa de Córdoba 2018.

Con sorpresa, no me lo esperaba, y con la lógica satisfacción por la decisión de la Agrupación de Hermandades y Cofrafias de confiar en mí para este precioso reto. Voy a ser, en 70 años, la tercera mujer que pregone la Semana Santa de Córdoba, algo que me llena de orgullo. Espero ser la voz de las inquietudes de los cofrades cordobeses, especialmente de la mujer cofrade.

Decididamente con mensaje. No pretendo aburrir con el detalle de mis vivencias cofrades, aunque algunas se tendrán que deslizar, pero sí que voy a contar qué es para mi la Semana Santa y cómo la siento y ahí si tengo un mensaje muy claro que es la fe y la devoción.

 

Sinceramente, creo que hay poco margen de maniobra. Un pregón es lo que es, no hay más. Y depende lo que se entienda por innovar. La clave del pregón es cómo mantener la atención de quienes lo están escuchando durante una hora, que ya me parece mucho tiempo. Más que introducir elementos nuevos, que no todo cabría en mi opinión, es fundamental hacerlo atractivo con el contenido y la forma de contarlo.

De bueno, muchísimo. Si pensara otra cosa no merecería la pena estar en este mundo. Es una forma de compartir tu fe con los demás, en hermandad, y con tu ciudad. Cuando ves las calles llenas por algo es, interesa. Es innegable que la Semana Santa de Córdoba ha evolucionado a mejor en muchos aspectos. Las cofradías han dado un salto cualitativo en patrimonio, en muchos casos están haciendo un gran esfuerzo. Por comentar algo negativo, la formación, en todos los sentido, nos queda mucho por hacer, y la puesta en escena del guión procesional. Soy “adicta” al orden y en muchas ocasiones los cortejos deben esmerarse más.

¿A qué hermandad pertenece y desde cuando?

Soy hermana de la Paz desde 2010 pero la devoción por la titular mariana de la cofradía es mucho anterior y heredada de mis padres. En el pueblo de mi familia, Montoro, soy hermana de la Borriquita, Padre Jesús y la Patrona, la Virgen del Rosario.

Es el acontecimiento más grande que va a vivir la hermandad y así lo estamos disfrutando todos. Desde que el Cabildo de hermanos aprobó por aclamación iniciar los trámites y el Obispo nos lo autorizó, estamos poniendo mucho empeño en el proyecto. Lo primero ha sido impulsar la obra social de la coronación con campañas de recogida de fondos. Bajo indicación del obispo, colaboraremos en la iniciativa “Paz y Esperanza para los jóvenes y su dignidad” de ayuda a jóvenes en situación de exclusión social. También hemos impulsando la recogida de adhesiones, a lo que ha seguido la elección de un logotipo y cartel para el proceso hasta la coronación así como un lema, Córdoba, corona de La Paz, con el que pretendemos la implicación de toda la ciudad en la coordinación de nuestra Titular. Estamos trabajando con muchísima ilusión.

Relativamente recientes porque mi vinculación a las cofradías ha sido siempre como devota “de a pie”, de lo que me siento muy orgullosa. Impagable era acompañar a mis padres como promesa detrás de la Virgen de La Paz.

¿Un momento de la Semana Santa que siempre procura vivir?

Hay tantos…y no siempre vinculados a una estación de penitencia. Soy de visitar Sagrarios, de Vía Crucis, y el besamanos de la Virgen de La Paz el Viernes de Dolores es muy especial. Ahí empieza la Semana Santa. Y el Miércoles Santo, el momento más especial, sin duda, es el paso de mi Hermandad por la Catedral.

¡Espero que si! No concibo la Semana Santa de Cordoba sin que todas las hermandades hagamos estación de penitencia en la Catedral. Es nuestra razón de ser. Se que supone un gran esfuerzo para las cofradías y para la ciudad pero cuando se consolide y lo veamos con la perspectiva del tiempo entenderemos que es lo mejor que le ha pasado a la Semana Santa de Córdoba. Es algo único. Y lo más importante, lo que nos une a los cofrades está en la Catedral. Los problemas de recorridos y organización en el entorno se podrán ir superando, espero., por el bien y para el disfrute de todos.

 

Si la conocía. El mundo cofrade se ha expandido de una manera tremenda y es interesante que haya iniciativas que recojan el caudal de noticias que generan las cofradías, siempre con rigurosidad.